Un triste ejemplo de por qué no podemos dejar lo fundamental de la educación de nuestros hijos a los demás. En esta entrevista, un Sacerdote pretende congraciarse con el establishment que tritura a los niños no nacidos, valiéndose para ello, de la figura del Beato Juan Pablo II.
El Sacerdote Novoa tiene todo el derecho a buscar figuración para sí mismo o para alguna agrupación. A lo que no tiene derecho, es a confundir la voluntad del ser humano para hacer lo que quiera, con la «autorización» para matar a un inocente.
No bajes la guardia: no te fíes de nadie por el cargo que tenga o el contexto en el que esté: enséñale tu mismo a tu hijo que una mujer que aborta, es una madre de un hijo muerto. Y que un hombre que le «ayuda» a una mujer a abortar, o la empuja disimuladamente a que lo haga, no merece ser caballero.
En otros tiempos se hablaba de que el caballero era un hombre que por ser bueno, tenía entre otras cosas un caballo. Ojalá no tengamos que llegar a que los caballos nos enseñen, pariendo sus crías, que la vida se debe respetar.
P.D. Y por supuesto que estoy de acuerdo con que se necesita apoyo para que las mujeres no aborten. He escrito en muchas ocasiones al respecto.
EXCELENTEEEEEEEEEEEE!!!!!!!!!!!!!!
En este mundo tan convulsionado no hay palabras para agradecer a aquellos que como Saulo Mediana, dejan de lado sus preocupaciones particulares para ponerse al servicio de los demás. Gracias porque con muchas semillas como usted es que se va llenado de buenos frutos el huerto de Jesús.
Alabado sea Jesucristo