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Tener hijos no lo convierte a uno en padre,
del mismo modo en que tener un piano no lo vuelve pianista.
Michael Levine
Hace seis meses, aproximadamente, se aprobó el aborto en Colombia; hace menos de un mes, comenzó a “ambientarse” el proyecto de ley que permitiría en nuestro país, la Eutanasia. La semana anterior, pasó uno de los debates, una ley que aboga por los derechos patrimoniales en las uniones de personas del mismo sexo (habrá que aclarar que son dos, ya que de pronto se les ocurra en unos años aprobar uniones de 3 o mas).
Es difícil hablar de estos temas sin correr dos riesgos: (1) creerse autoridad y administrador del bien y del mal; (2) por rechazar algunos comportamientos, se termina excluyendo a la persona (homosexual, legislador pro homosexual, médico abortista, etc.)
En estos temas, podemos utilizar la misma estrategia de argumentación que hemos llevado con el aborto: analizar las consecuencias de las propuestas que están sobre la mesa. Y quiero comenzar con unas preguntas breves, pero de implicaciones complejas:
- ¿Estas propuestas de qué manera afectan la constitución de la familia en la sociedad?
- ¿De que manera se relacionan estas propuestas con la vida?
- ¿Por qué es importante analizar la familia como institución en una sociedad?
- ¿es la familia la única manera de educar niños?
En los próximos mensajes, revisaremos estos temas con mas detalles; no olvides conversar con tus hijos, según sus edades, de estas realidades. ¿Quién está mas interesado en el corazón de tu muchacho: el periodista que gana mas audiencia diciendo lo que la mayoría quiere oír, o tu amor de padre o madre?
En pocas líneas…
- A veces, ver la grandeza del universo, nos ayuda a reconocer que nuestra vida no es azar: http://www.20minutos.es/galeria/1385/0/0/Hubble/espacio/fotografias/
- Te imaginas a la humanidad sin la vida de este hombre? http://www.vidahumana.org/vidafam/aborto/papa.html
Mas información:
El Conocimiento al Servicio de la Persona
>Hola Saulo, te felicito por este blog. Con respecto a la temática gay, sería demasiado bueno que nuestras mismas familias aceptaran y toleraran a sus hijos gay, entendieran que así como uno de sus hijos no pidió nacer heterosexual, el otro no pidió nacer gay.