>En la pasada campaña presidencial, una amiga me preguntó por quién iba a votar. Teniendo como criterio, la lucha contra el aborto, me di cuenta que solo la candidata del Partido Conservador manifestaba estar a favor de la vida. Los dos mas opcionados en términos generales planteaban la misma cosa, así a Mockus le hayan mostrado mas su pensamiento al respecto, el actual Presidente está lejos de manifestaciones provida.

Mi amiga, mujer inteligente, me decía, si ambos piensan igual, entonces ese no es criterio para escoger. Y me preguntaba yo qué proponía con relación a esto. Bueno, después de varias semanas difíciles en lo familiar, quiero hilvanar algunas ideas que he visto que son eficaces en la formación de hijos y jóvenes provida,

• Hay que desengañarse de las instituciones públicas, pues ellas están conformadas por hombres y mujeres que en su mayoría, mas temprano que tarde terminan poniendo sus propios intereses en primer lugar para así obtener ventajas económicas, políticas, de status o profesionales para ellos mismos.
• Por lo tanto, un cambio en el ordenamiento legal, está bien lejos de suceder, pues los cráteres que hay en nuestra legislación no serán corregidos mientras los magistrados y congresistas vean en los derechos sexuales y reproductivos, un escalón para subir en su carrera personal y en su patrimonio.
• Confiar en las instituciones provida en Colombia es algo que debe hacerse; pero debemos ser concientes que la ola abortista llegó a nuestro país, hace tan sólo 5 años y todavía falta mucha sangre inocente derramada para adquirir convicciones profundas que se traduzcan en acciones concretas a favor de los no nacidos.

No quiero pintar un panorama desolador, sino mas bien realista: el fermento para un cambio que implique el respeto a la vida, no está en la ley ni en intentar modificarla, pues la muerte tiene sus guardianes para que la primavera no florezca en nuestros corazones.

Lo que yo he visto que es útil, lo resumo en lo siguiente:

• Mostrar que la vida SÍ es posible, con hogares estables y fuertes.
• No pretender cambiar de una a la cultura de la muerte, sino ir uno a uno para convencernos todos que SÍ es posible.
• Enseñar en las familias que el amor SÍ es posible y que la vida debe ser respetada; no esperemos a que un congresista cambie las leyes, pues el piensa en las próximas elecciones, no en la próxima generación. Y dentro de 4 años no votarán los niños a los que se les respete la vida ahora, sino las mujeres que creen reafirmar su autoestima «decidiendo sobre su propio cuerpo».

Continuará…

P.D.: gracias a TODOS quienes me expresaron sus muestras de cariño con ocasión de la muerte de mi mamá. Lamento mucho si a alguno o alguna no le expresé mi gratitud de manera suficiente durante las exequias o en algún otro momento.

Gracias de Nuevo