>Continuamos con la última parte de un tema que iniciamos antes .
Cuando nuestra atención se centra en mirar lo negativo que pasa en nuestra vida la tristeza tiende a consumirnos en nosotros mismos. Qué hacer al respecto? Experimentar el dolor de la depresión (hay que haberlo vivido para saber de qué se habla), es algo que no tiene fin: siempre se encontrarán motivos para estar aún mas triste.
Es como si uno recibiera un mensaje constantemente de «estás solo… no vales nada… no lo intentes… siempre serás un fracasado…»
La cuestión es que, desde afuera de la persona, objetivamente se pueden identificar oportunidades, caminos de vida, para salir de esa dificultad profunda que es la depresión. Por qué la persona prefiere centrar su atención en lo que le produce tanto dolor? Al respecto, podemos decir algo que sucede antes de la depresión y algo que sucede dentro la depresión.
Qué sucede antes? que somos una sociedad que no le gusta el dolor: vendemos la idea de que todos tenemos que ser triunfadores, no importa cuál sea el desafío; hay que ser el perfecto ejecutivo, el perfecto padre y el perfecto hombre, porque si en algo llegamos a fracasar nos va a ir muy mal: la compasión no es algo que camine por las calles de nuestra vida por estos días y seguramente, los demás nos podrían caer encima.
Ese miedo al fracaso, pues creemos no tener apoyo si fracasamos, hace que en el momento de un verdadero error, el dolor (y hablo desde lo emocional) sea mucho mas fuerte, llegando a incapacitarnos para actuar y tomar medidas para controlar nuestra vida. Ese dolor puede llegar a ser tan intenso para una persona, que comenzamos a ver cómo se presentan abuso con los tranquilizantes, con el fin de no sentir.
¿Qué sucede dentro de la depresión?
Seguramente esta respuesta sonará «seca» o poco caritativa a algunas personas, pero una manera de entender ese deseo de abrazar la tristeza, puede ser identificando las «ventajas» que recibe la persona por permanecer en su tristeza. Es que hay alguna ventaja? yo veo una…Mientras alguien está triste, sumido en sus problemas, los que están a su alrededor asumen que no tiene la capacidad para luchar contra sus dificultades. Y si alguno le hace un reclamo al deprimido, su expresión verbal y no verbal lo convencerá de que no hay nada qué hacer.
La tristeza, entonces, se convierte en una «zona de seguridad» en donde el deprimido está a salvo de intentar solucionar sus problemas, con el posible riesgo de un fracaso, que así sea temporal, sería muy aversivo para él, como lo dijimos antes.
Todas estas razones me convencen cada vez mas, en cuanto a que en la terapia de la depresión, es necesario un componente espiritual muy importante: las creencias religiosas de la persona. Me gustaría conocer las opiniones de quienes leen estas líneas.
>Esos mensajes que algunos recibimos de que no valemos nada, que no lo intentemos porque siempre vamos a fracasar, son muy dolorosos, pero los aceptamos, a veces son la única compañía que tenemos…El miedo a ser tachados como fracasados nos hunde cada día más; el miedo a la vida, al presente y AL FUTURO, es un miedo que nos acompaña y que nos hace pensar y hacer cosas… que talvez no queremos pero que puede ser una salida (aunque cruel y dolorosa).Pero cuando empezamos a conocer de un “Dios que nos ama y que su amor es eterno…” las cosas se ven diferentes, de otro color, empezamos a ver que en el fondo de esa oscuridad en la que nos encontramos hay una luz, una hermosa luz que brilla mucho y que dice confía en mi, yo te consuelo, yo di la vida por ti para que no sufras, para que no haya odio en tu corazón para que perdones. Definitivamente el amor de Dios es la única salida.
>Creo que son varios los comentarios que tengo, como son varios los temas de este post: Muy interesante esta forma de ver la tristeza interior de una persona: como un escudo, como una excusa para siempre estar aún más triste. Mi para nada orgullosa experiencia de más o menos 25 años viviendo entre un desánimo inconstante, como cosa pegajosa que me impedía estar tranquila y feliz, a pesar de permanecer en compañía de personas espirituales me enseñó cosas y es que de alguna manera uno siempre espera que aparezca el responsable de tal condición, y se van buscando culpables y cortando cabezas, regando el desánimo como una plaga y claro, la gente primero se acerca al que tiene semblante triste pero luego se aleja. Las bonitas reflexiones y los consejos y los abrazos eran meros paliativos, pero la cosa pegajosa permanecía.
>otra cosa que tengo que decir es que la idea de que siendo mediocre (lo que en el post leo como sinónimos de fracaso) también se puede ser feliz, es poco común, desconocida, ajena, nadie la quiere pero todos nos la tragamos a diario como un amargo medicamento que no nos cura de nada.
>En cuanto a lo que dice al final que para la terapia en la depresión el componente espiritual es muy importante, en mi opinión es verdad, de la misma manera que la Fe necesita también una estructura interior de la persona para poder vivenciarla. Seguramente a los sicólogos se los inventó Dios para que le ayuden.
>Gracias por este Camino de Vida. Me atrevo a escribirle mi opinión; en primer lugar, porque sé por experiencia propia lo que es la depresión y porque por Gracia de Dios salí de ella. En mi caso hubo alguien que me habló fuertemente de mi realidad; me dolió por mucho tiempo las palabras de esa persona, pero fue lo que provocó en mi interior una crisis que llevó a actuar y Dios que es grande y maravilloso me tomó de su mano y me sacó Adelante. Dios me dió vida nueva y ahora soy feliz y cuando las dificultades se presentan y los problemas, agobian sé que mi Padre Dios todo lo sabe, me ama y esta pendiente de mi y si El está conmigo, ¿quién contra mí? Todo lo permite Dios para bien de los que ama, y El me ama mucho de eso estoy muy convencida. Aunque haya tormentas y la barca parezca naufragar y parezca que El esta dormido, El está ahí y no permitirá que la barca de mi vida se naufrague. «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece». Definitivamente soy una convencida que la vida sin fe, sin Dios es un infierno, es muy triste. A alguna persona que se encuentre deprimida le recomiendo leer o que le lean los salmos del 145 al 150, La Alabanza a Dios es efectiva para salir de algún momento de baja de animos.
>Hermano,Lo que yo puedo comentar es que esto que escribes corresponde a lo que ha sido mi experiencia con personas deprimidas. Sin embargo, te preguntaría: ¿hay espacio para la mediación en algún caso de depresión? ¿Qué determina eso, o sea, cuándo es útil/necesaria la medicación?